viernes, 30 de marzo de 2012

A 111 años del nacimiento de Discépolo (La vigencia de "Mordisquito")

Fragmento
“…Resulta que antes no te importaba nada y ahora te importa todo. Sobre todo lo chiquito. Pasaste de náufrago a financista sin bajarte del bote. Vos, sí, vos, que ya estabas acostumbrado a saber que tu patria era la factoría de alguien y te encontraste con que te hacían el regalo de una patria nueva, y entonces, en vez de dar las gracias por el sobretodo de vicuña, dijiste que había una pelusa en la manga y que vos no lo querías derecho sino cruzado. ¡Pero con el sobretodo te quedaste! Entonces, ¿qué me vas a contar a mí? ¿A quién le llevás la contra? Antes no te importaba nada y ahora te importa todo. Y protestás. ¿Y por qué protestás? ¡Ah, no hay té de Ceilán!...”
“…Te pasaste la vida tomando mate cocido, pero ahora me planteás un problema de Estado porque no hay té de Ceilán. El país empezó a caminar de otra manera, sin que lo metieran en el andador o lo llevasen atado de una cuerda; el país se estructuró durante la marcha misma; ¡el país remueve sus cimientos y rehace su historia! Pero, claro, vos estás preocupado, y yo lo comprendo: porque no hay té de Ceilán...”
“…¡Ah… ni queso!.¡No hay queso! ¡Mirá qué problema! ¿Me vas a decir a mí que no es un problema? Antes no había nada de nada, ni dinero, ni indemnización, ni amparo a la vejez, y vos no decías ni medio; vos no protestabas nunca, vos te conformabas con una vida de araña. Ahora ganás bien; ahora están protegidos vos y tus hijos y tus padres. Sí; pero tenés razón: ¡no hay queso! Hay miles de escuelas nuevas, hogares de tránsito, millones y millones para comprar la sonrisa de los pobres; sí, pero, claro, ¡no hay queso! Tenés el aeropuerto, pero no tenés queso. Sería un problema para que se preocupase la vaca y no vos, pero te preocupás vos. Mirá, la tuya es la preocupación del resentido que no puede perdonarle la patriada a los salvadores. Para alcanzar lo que se está alcanzando hubo que resistir y que vencer las más crueles penitencias del extranjero y los más ingratos sabotajes a este momento de lucha y de felicidad. Porque vos estás ganando una guerra. Y la estás ganando mientras vas al cine, comés cuatro veces al día y sentís el ruido alegre y rendidor que hace el metabolismo de todos los tuyos. Porque es la primera vez que la guerra la hacen cincuenta personas mientras dieciséis millones duermen tranquilas porque tienen trabajo y encuentran respeto.
Cuando las colas se formaban no para tomar un ómnibus o comprar un pollo o depositar en la caja de ahorro, como ahora, sino para pedir angustiosamente un pedazo de carne en aquella vergonzante olla popular, o un empleo en una agencia de colocaciones que nunca lo daba, entonces vos veías pasar el desfile de los desesperados y no se te movía un pelo, no. Es ahora cuando te parás a mirar el desfile de tus hermanos que se ríen, que están contentos… pero eso no te alegra porque, para que ellos alcanzaran esa felicidad, ¡ha sido necesario que escasease el queso!
No importa que tu patria haya tenido problemas de gigantes, y que esos problemas los hayan resuelto personas. Vos seguís con el problema chiquito, vos seguís buscándole la hipotenusa al teorema de la cucaracha, ¡vos, el mismo que está preocupado porque no puede tomar té de Ceilán! Y durante toda tu vida tomaste mate! ¿Y a quién se la querás contar? ¿A mí, que tengo esta memoria de elefante?...”
¡No, a mí no me la vas a contar!".
Enrique Santos Discépolo, o "Discepolín". Actor, director, dramaturgo, compositor y cineasta. Su inclaudicable compromiso social lo llevó a apoyar la campaña electoral de Perón desde su programa radial: "¿A mí me la vas a contar?", feroz retrato de "Mordisquito", epítome de una clase social banal, regida por las apariencias y el lugar común.
Su intervención le granjeó el odio y el desdén del sector social al que pertenecía, lo que lo sumió en una profunda amargura, acelerando su deterioro físico, hasta que su corazón ya no pudo más y dio el último adiós el 23 de diciembre de 1951.
De "Mordisquito" Discépolo dejó esta reflexión para todos los tiempos y cualquier similitud con la realidad es pura coincidencia.
(TELAM 27/03/2012)

viernes, 23 de marzo de 2012

24 de marzo. Día Nacional de la Memoria por la Verdad y la Justicia

El Golpe de Estado del 24 de marzo de 1976, fue el más sangriento de la historia argentina. Instauró una dictadura que gobernó la Argentina entre 1976 y 1983 a través de una Junta Militar. El gobierno secuestró, torturó y ejecutó clandestinamente. Las personas detenidas en estos centros clandestinos fueron conocidos como “los desaparecidos”, muchos fueron ejecutados y enterrados en fosas comunes o arrojados al mar desde aviones militares.
Desde el estado implementaron siniestros mecanismos de apropiación de los bebés de madres en cautiverio.
En 1982 el gobierno militar emprendió la Guerra de Malvinas contra el Reino Unido. La derrota infligida provocó la caída de la tercera junta militar y meses más tarde la cuarta junta llamó a elecciones para el 30 de octubre de 1983, en las que triunfó el candidato de la UCR, Raúl Alfonsín.
Los miembros de las tres primeras juntas del Proceso fueron enjuiciados por los delitos cometidos durante su gobierno, como consecuencia del Decreto 158/83, que también creó la Comisión Nacional sobre la Desaparición de Personas (Conadep) para investigar las violaciones de derechos humanos ocurridas entre 1976 y 1983.
En 1989 y 1990 el presidente Carlos Menem dictó una serie de indultos que beneficiaron a los funcionarios del Proceso y a los jefes guerrilleros.
Por iniciativa del Presidente Néstor Kirchner, las leyes de Punto Final y Obediencia Debida fueron derogadas por el Congreso de la República Argentina y los juicios se reabrieron, en tanto que la justicia comenzó a declarar inconstitucionales los indultos por crímenes de lesa humanidad que habían cometido los militares durante la última dictadura. En 2006 se han reabierto 959 causas penales, que siguen en marcha. En ese mismo año, se estableció el 24 de marzo como el Día Nacional de la Memoria y la Justicia.

jueves, 22 de marzo de 2012

Héctor Ricardo Soulé

Nacido en el gran Buenos Aires, el 15 de marzo de 1950.
Padre de 5 hijos (todos vinculados al arte), amante de la cetrería, creativo, sensible a valores esenciales como la nobleza, la camaradería y el respeto hacen de Ricardo Soulé un hombre reconocido en el ambiente musical.
Músico, guitarrista, violinista y miembro fundador de Vox Dei (1969 a 1981 y de 1986 a 1989). Formó parte como autor e ideólogo de las obras más trascendentes de aquella banda de culto de fines de los ´60.
“…A nosotros nos reprimieron mucho en aquellos tiempos. Nuestra ideología era la de la paz y el amor sobre todas las cosas. Si eso es de izquierda, pues éramos de izquierda…”
Si bien su separación oficial de Vox Dei no tiene una fecha exacta, se puede decir que desde 1974 trabajaba en proyectos paralelos al grupo; “Vuelta a Casa” marcaba otro tipo de inquietud musical, el trabajo sale en 1976 con poco éxito comercial.
A principios 1978 trabaja con Vox Dei en la grabación de “Gata de Noche”, pero la excelente repercusión el álbum no ocultó los problemas internos de la banda y anuncia su alejamiento.
En 1981, reimpulsa un viejo proyecto: El Cid Campeador, que toma forma y daría vida a su segundo álbum solista, “Romances de Gesta” junto a Edelmiro Molinari, en 1982
En 1985 editó su tercer disco, que llevó su nombre, Ricardo Soulé.
Después de casi 5 años retornó con Vox Dei en 1986, con quienes grabó dos discos más, pero en 1989 decide emigrar a España. Tiempo después, en 1991, sale a la calle “Osadía”. Luego de un período en el que poco se supo de él, en 1995 se conoce su nuevo trabajo “Cronología”.
En 1996 regresa, para dar forma a lo que fue su última reunión, con el viejo grupo (Vox Dei), del que se alejará definitivamente a finales de 1998, después de grabar una segunda versión de lo que fue la originaria y más aclamada obra conceptual en el rock de la Argentina, “La Biblia”, que data de 1971.
Con la llegada del nuevo milenio, entre viajes al exterior y presentaciones en el interior del país con diferentes bandas, siempre lideradas por él,  transcurre la primera mitad de la década, hasta que en el 2006 se conoce el álbum “Soulé en Rio Turbio” (trabajo en vivo) y en el 2008 “Buddy Middler”. Estos fueron los trabajos previos a la llegada, en el 2011, de su sexto disco de estudio, "Dolmen" junto a músicos invitados como Manuel "Negro" Quieto (Mancha de Rolando) y Gustavo "Chizzo" Nápoli (LaRenga); ellos reconocen a Ricardo Soulé como influencia importante en sus carreras y como ícono del Rock argentino.
En abril de 2011, en plena Semana Santa, junto a LBE (La Bestia Emplumada) se presenta en el teatro Auditorium de Mar del Plata para ejecutar "La Biblia", en conmemoración de los 40 años de su primera edición, “…Estoy orgulloso. Bah!, orgullo es una palabra pobre. Estoy halagado de haber hecho una cosa así…”
Para el 2012 tiene proyectado iniciar giras que no solo lo llevarán por Argentina, sino también por escenarios europeos y de Oceanía.

“…A veces el arte y la vida suelen conjugar el mismo verbo: el del AMOR. Coinciden cuando una persona crece con respeto hacia sí y el prójimo, y además está ligado a la música como forma permanente de expresión, sentir y pensar…”