Mucho he leído en estas últimas horas sobre Inseguridad, Secuestros Extorsivos, Hipótesis y formas de Pensamiento Delictivo por Medios Gráficos, TV Abierta, TV por Cable, Internet y el Bar de la vuelta de casa. Sin lugar a dudas estoy rodeado de expertos en el tema de “inseguridad”, aunque aparentemente este caso no encuadraría dentro de lo que nos preocupa a todos que es la “maldita inseguridad”.
“Opinólogos Calificados” que pretenden confundirnos a todos, insisten en que a fuerza de cacerolazos esto se soluciona, aplicando un sentido poco común a algo que debería tratarse con sentido común.
Sé que el sentido común es, de los sentidos, el más difícil de plasmar, pero por favor abran la cabeza e infórmense de una manera no contaminada de política barata y llena de virus apuntando directo a nuestro disco duro.
La cantidad de información que hemos recibido no está ligada directamente a la calidad de esa información; subestimando nuestro poder de raciocinio, muchos pensaron que informar es dejarnos ver en vivo y en directo el morbo que produce el dolor de la pérdida de un hijo, Dios Mio!!!
Señores/as a quien tenga ganas de leer esto y tal vez compartir este pensamiento, utilicemos el sentido común para este caso que no es común y que divide más las aguas y nos sumerge en discusiones sin fin, que en algunos casos nos consume lo mejor que tenemos.
Desafortunadamente esta criatura pagó con su vida la aparente desidia de mayores y ha dado las más disímiles formas de intolerancia exacerbadas. Mi deseo como padre es que descanse en paz, que paguen los culpables de este hecho atroz y que el sentido común nos haga reflexionar sobre lo importante que es entender antes que saber, solo hay que utilizar el sentido común.